martes, 21 de noviembre de 2017

LA SEGURIDAD PÚBLICA, TAREA DE TODOS.

Prácticamente durante los seis años de la anterior administración estatal, el gobierno de Roberto Sandoval pretendió engañarnos con la versión de que Nayarit se ubicaba en el nada despreciable segundo lugar dentro de las entidades más seguras del país.

Sin embargo, los estudiosos del tema a nivel nacional y obviamente quienes vivimos en Nayarit y conocíamos nuestra realidad, sabíamos que esas cifras estaban maquilladas por la ausencia de denuncias ante las autoridades correspondientes, producto de la pérdida de confianza y credibilidad en ese gobierno y sus instituciones.

Lamentablemente en ese juego perverso cobró un papel preponderante el gobierno federal, pues evidentemente se prestó al engaño que pretendieron hacer quienes estaban obligados a garantizar la seguridad de los nayaritas y que por el contrario, provocaron un clima de corrupción, zozobra e impunidad.

Hoy la realidad casualmente es otra y de  acuerdo con cifras del propio Secretariado Ejecutivo de Seguridad Nacional, Nayarit se ubica dentro del grupo de estados del país que junto con Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Chihuahua, Ciudad de México, Estado de México, Michoacán, Morelos, Nuevo León, Puebla, Sonora, Tamaulipas y Veracruz, ha sufrido un notable incremento en el índice de “homicidios dolosos”, en su gran mayoría asociados a incidentes violentos vinculados al crimen organizado.

Los hechos de violencia suscitados la madrugada de ayer en Tepic y que cobraron la vida de una joven maestra y de un estudiante de medicina, han cimbrado a la sociedad nayarita que con justa razón hoy exige de las autoridades justicia y eficacia en las acciones que se vienen instrumentando para tratar de frenar la ola de violencia en nuestro estado.

En ese sentido, la postura oficial del gobierno de Antonio Echevarría García ha sido muy clara respecto de no negociar la tranquilidad de los nayaritas a cambio del “control de la plaza” y por el contrario, asumiendo que la recomposición del tejido social y la recuperación de la confianza ciudadana es tarea de todos y aprovechando el marco de los festejos de la revolución mexicana, hizo un llamado para que juntos, sociedad y gobierno, sumemos esfuerzos para encontrar lo más pronto posible una solución a este grave problema.

Estoy convencido de que todas las medidas que se lleven cabo y que estén orientadas a frenar la criminalidad en nuestro estado, deben de contar con el respaldo y solidaridad de los integrantes del Poder Legislativo de Nayarit, pues sin duda, alcanzar el bienestar de las familias nayaritas es nuestra mayor prioridad.

Sin embargo y como parte de esa tarea que nos echamos a cuesta, también seremos exigentes y vigilantes de los resultados que arrojen las estrategias instrumentadas, por lo que estaremos atentos para conocer las medidas que habrán de adoptarse y los plazos que el propio gobierno se fije para ello.  ¡Así sea!.
Para cualquier aclaración, comentario, duda, denuncia o reclamo sobre esta Columna estoy a sus órdenes en:







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