Desde el inicio del
gobierno municipal de Tepic, como Capital del Cambio, hemos manifestado nuestra
convicción de impulsar una democratización moderna en nuestro municipio,
sustentada en una verdadera y sólida participación ciudadana.
Históricamente, Tepic ha padecido los síntomas de una total desatención en el impulso a la infraestructura urbana y el fomento de la economía (entre otras actividades), producto del poco o nulo interés de quienes han gobernado el municipio, lo que ha derivado en un severo rezago social que ha ido en detrimento del bienestar de las familias tepicenses.
Como lo anunciamos desde el momento que asumimos la conducción del gobierno municipal, hemos creado el Instituto Municipal de Planeación de Tepic (IMPLAN) y en días pasados quedó formalmente constituido el Consejo Consultivo Ciudadano de dicho Instituto, cuyos integrantes serán los responsables de darle cause a todas las inquietudes y propuestas ciudadanas de nuevos proyectos de inversión pública, de definición de políticas públicas y de todas aquellas acciones de gobierno que impliquen la asignación de recursos públicos.
La interacción de las y los ciudadanos con la administración pública en función del interés colectivo, conlleva una alta carga valorativa, que denota su bondad de distintas formas.
Nos impulsa a ser más eficientes y a centrarnos en el interés público. Nos permite generar legitimidad, consenso y confianza. Nos vincula con conocimientos y recursos de la sociedad a favor del interés público, lo que a su vez genera soluciones eficientes a problemáticas sociales.
En ese contexto, ha quedado demostrado que cuando los gobiernos integran a sus habitantes al ejercicio de la gobernabilidad, los pueblos se desarrollan con mayor rapidez, sus gobiernos son más eficientes, honestos y transparentes en su desempeño y los niveles de satisfacción ciudadana son más elevados.
Hoy en Tepic hemos agregado un ingrediente adicional a esa voluntad manifiesta de abrir a la sociedad la posibilidad de incidir en la aplicación de los recursos públicos a través de lo que hoy conocemos como "presupuesto participativo", y es que le hemos dado un importante impulso al "enfoque de género" en la definición de las políticas públicas y de nuestras acciones de gobierno.
El cambio empezó en Tepic y va en serio.
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